El viaje en bus desde Las Vegas estuvo bastante entretenido, fueron 2 tramos, de LV a LA y luego de LA a SF.
El primer tramo acabamos de risas en la parte de atrás del bus porque me estaban intentando explicar las diferencias entre las comidas típicas de «los negros» y las de «los chicanos», claro, era una discusión de Steve, Adam (de familias mexicana y peruana) y Philip (afroamericano). Una conversación bastante surrealista que fue a mas cuando Tim (estadounidense caucásico) empezó a enseñarnos las fotos de «su plantación«… trabaja cultivando marihuana para su uso terapéutico, ya que en el estado de California (y en otros 20 estados más) su consumo y producción son legales para ese fin. Fue un viaje interesante, el conductor paraba de vez en cuando a ver que pasaba y ellos me decían que como nos estábamos riendo y divirtiendo podía ser sospechosos, jejeje… así es el transporte público en los USA.
Steve.
El segundo tramo hasta SF lo pasé durmiendo. Llegué bien temprano en la mañana e intenté buscar alojamiento.
En esta ciudad conviene reservar con antelación porque siempre suelen estar completos todos los lugares asequibles en precio. Yo llegué cerca de las 7 a.m. y no encontré sitio hasta las 2 de la tarde, y tuve suerte de que no se presentaron unos que habían reservado ya para el HI San Francisco Downtown. Fueron 24$ en dormitorio de 4 camas con desayuno incluido. El personal es muy buena onda y el sitio está bastante bien, pero resulta un pelín aburrido… igual es por la cantidad de huéspedes japos y koreanos, que suelen ser un poco sosos. 😀
Otro problema de los hostales en los States es cuando preguntas si tienen cocina… siempre te dicen que si porque para ellos una cocina es nevera, microondas y tostadora. No saben usar los fuegos y aunque tengan cocina, si es de gas, no dejan usarla porque dicen que es peligroso, ejem…
Total, que como no puedes cocinar mucho se gasta mas en comer fuera. Y la mayoría de hostales fue lo mismo.
Una vez que conseguí habitación dejé las cosas y me fui a recorrer la ciudad. La primera impresión fue buena con la entrada por el Bay Bridge, incluso en el paseo de varias horas buscando hogar me pareció que me gustaría… y pocas horas después me había «enamorado» de San Francisco. Fue algo que tampoco me esperaba, pero es de las pocas ciudades en las que me he planteado que podría vivir un tiempo, y mejorar el inglés. La ciudad es bonita y me inspiró bastante a nivel fotográfico, la gente es amable y simpática (en los states?) y era la primera vez en este país que estaba en un lugar que se podía recorrer andando, vamos… que no dependía de un coche.
Por SF pasé 4 veces, la usé de base para ir a Yosemite, luego al Big Sur y a los Grandes Lagos…
En el primer paseo recorrí la zona centro: Union Square, Market St., el Downtown, las casas victorianas de Alamo Square… si, las de Padres Forzosos, jeje.
¿Las gemelas estarán dentro?
Y al día siguente fui desde el centro hacia Rusian Hill, quería ver el Golden Gate desde lo mas alto de la ciudad, desde las empinadas calles donde tantas escenas de persecuciones de coches se han rodado. Yo miraba cada carro que pasaba como si fuese a ver, en su interior, a Steve Mcqueen convertido en Bullitt lanzando su coche colina abajo para perseguir a «los malos«.
Y de allí al embarcadero y la playa para acabar en el Golden Gate. Un lugar muy fotogénico.
Todo el recorrido fue andando y por el camino encontré curiosos personajes para charlar y «pintar el aire de negras palomas«, para «caminar sobre nubes de pegatina» y dejarme sorprender por lo que se me ofrecía a la vista… que dirían Los Delinqüentes.
Unos de esos curiosos personajes.
Un paseo bonito en una ciudad tranquila, muchas fotos y vuelta en tranvía (como no).
De SF salí para el Parque Nacional de Yosemite. Tenia muchas ganas de tocar El Capitán, una de las paredes de escalada mas importantes del planeta y lugar donde se desarrollaron las técnicas de escalada en fisuras y en pared durante los 70 y 80.
Las opciones para ir eran:
1. – Transporte público y acampar dentro del parque. No llevo tienda y la conexión con SF no es demasiado buena.
2. – Alquilar coche. Salia un poco caro para mi solo y no encontraba a nadie para compartir gastos.
y por último y la que tocó… 3. – EL TOUR!.
Fueron 249 $ por 3 días y 2 noches. Incluía transporte, alojamiento en camping con tienda, comida, cena y desayuno para los 3 días.
El grupo fueron 10 personas. Por suerte la mayoría era gente a la que le gustaba la montaña y estuvo bastante bien. Fueron 4 alemanes/as, 2 inglesas, 1 brasilero, 1 australiano, Tuly de Sevilla y yo, como ya sabéis, de Hortaleza (por cierto, Tuly un crack).
Al llegar hicimos un pequeño trek a Sentinel Dome para ver el valle y el majestuoso Half Dome (otro lugar mítico del montañismo). Visitamos también Glacier Point y caminamos por Wawona, el centro histórico del parque. Es donde se encuentra Mariposa Grove of Giant Sequoias. Arboles gigantes que llegan a tener hasta 2700 años de antigüedad. Fue espectacular ver esos inmensos ancianos y pensar en todo lo que ha cambiando el mundo durante la vida de cualquiera de esos arboles.
Cada noche volvíamos a dormir al camping, cocinábamos y terminábamos la noche como en las viejas películas de cowboys que veía de pequeño: calentando marshmallows pinchados en un palo y charlando al lado del fuego. Faltaban los sombreros y las pistolas… por suerte. Una escena bastante hortera la verdad, pero donde fueras…
Y el último día nos lo dieron «libre«, yo me fui con Tuly a tocar El Capitán y ver si algún alma caritativa me dejaba hacer una vía aunque fuese. Pero solo tocarlo y verlo de cerca fue impresionante.
Me contenté con un poco de Boulder en los bloques que tiene alrededor y seguimos caminando por el valle.
En medio del camino me encontré con Paul (Nueva York). Le había conocido 4 meses antes en Laos (camino a Vientiane), y volvíamos a encontrarnos en medio de Yosemite para demostrar, una vez más, lo pequeño que, a veces, puede resultar el mundo.
A la vuelta tuvimos la suerte de ver una cría de oso, no es algo típico encontrarlos de día en Yosemite. Hicimos unas fotos y marchamos antes de que llegase «mama osa» con su mal humor. Y ya llegando a SF la guia y el clima nos regalaron unas bonitas fotos del Skyline de SF desde Yerba Buena Island. Ese día, por suerte, no había niebla, algo común en toda la Bahía de san Francisco.
Esa noche salí con Tuly a tomar unas cervezas en «cualquier sitio» y a la mañana siguiente me fui a ver a Henry a Monterrey, en la zona de Big Sur. A Henry le había conocido en China 7 meses atrás, seguimos hablando por mail y una vez allá me ofreció alojarme en su casa y la posibilidad de acompañarle para hacer un pequeño reportaje de su trabajo en Ventana Wilderness Society.
Ventana es un activo grupo privado que trabaja en la protección de la vida salvaje en Big Sur. Henry es biólogo y se encarga de mantener seguimiento y facilitar la reproducción del California Condor. Un espectacular animal en peligro de extinción del que solo quedan 140 ejemplares en toda California. Son casi 2 metros y cerca de 15 kg para un ejemplar adulto… verlos de cerca es la ostia.
Las fotos del reportaje para Ventana Wilderness Society.
Fue muy divertido y didáctico, ademas de disfrutar de los espectaculares paisajes que recorrimos por la zona en la que localizábamos los Condor (bueno, ellos, yo localizaba más bien poco). Me encanto seguirles el día y poder ayudar a Ventana en su labor de protección de la vida salvaje en Big Sur... un paisaje de acantilados con leones de mar y riscos escarpados realmente espectaculares.
Pasé unos días en Monterrey, una tranquila ciudad costera, y aproveché para tener unas buenas conversaciones políticas y sociales con Henry y sus amigos sobre las espectativas para las elecciones que se celebrarían en Noviembre, y descubrí como piensa los jóvenes californianos medios. Me ayudo a confirmar que California es como una isla en medio de los States.
Conocí a gente con unas ideas mucho mas progresistas de lo que esperaba encontrarme antes de llega. Por supuesto que nunca serán foco de ninguna revolución… pero algo es algo.
Me alegró volver a ver a Henry 7 meses después de haber pasado juntos el Año Nuevo Chino en Guanghzhou… a ver si la próxima vez nos vemos en Hortaleza. ¡Gracias Henry! (Thanx man!).
Y nueva vuelta a SF. La mejor forma que hay para desplazarse entre Monterrey y Frisco es ir de Monterrey a San José en autobús y luego en Amtrak (tren) hasta Frisco, son menos de 15 $ y entre 4 y 5 horas de viaje.
Este nuevo paso por SF era un poco especial… tenia visita. Pero mejor os lo explico en el siguiente post que este ya esta siendo un poco largo… y podéis entreteneros con las fotos que hay un montón:
Las fotos de San Francisco… estas me gustan, y habrá más.
Las fotos del reportaje para Ventana Wilderness Society.
Todas las fotos de Yosemite.