Esta es una parte del muro ilegal que divide los Territorios Palestinos a su paso por Calandia (un campo de refugiados al lado de Ramallah). La foto es de ayer, me dirigía al Children and Women Club para ver y fotografiar una de las clases de solfeo que la escuela de música Al Kamandjati imparte a los niños refugiados.
Nada más cruzar el check-point que da acceso a la zona me bajé del autobús para llegar caminando hasta el lugar donde había quedado con Oscar (el profesor de solfeo) y poder ver un poco más de este muro y las condiciones de vida en el campo de refugiados.
Las impresiones las detallaré más adelante, la impresión me la llevé al ver este mastodonte de cemento que impide la libre circulación de personas en sus propias tierras.
Llegué con tiempo de sobra y acabé sentado con unos niños palestinos que me ayudaron a buscar el Club, hablando con ellos el corazón se me encogió cuando me preguntaron como era Jerusalem, a pesar de que son solo 6 los kilómetros que separan Calandia de esta histórica ciudad nunca habían tenido la posibilidad de visitarla.
Es la desgracia de nacer en una cárcel, es la «suerte» que les ha tocado vivir y no es algo que les haga perder la sonrisa, estaban encantados de poder pasar un rato conmigo; ese tipo raro que venía desde muy lejos (Esbania) y que no hacía más que preguntarles por su vida.
Supongo que el interés de los demás ayuda a verse como persona, espero que mi interés por ellos les hiciese sentirse importantes. Lo suficiente como para que alguien que no les conoce de nada viaje desde muy lejos solo pasar un rato a su lado.
Por que para esto decidí venir a Palestina, para conocerles a ellos… y a muchos más. Para conocer una gente interesante y amable que para mi (a pesar de lo que diga el mundo), son tan importantes como cualquiera, para mi, son sobre todo PERSONAS, no una cifra más en las páginas de un periódico o cualquier informe de la ONU.
(*) Por si alguien andaba preocupado solo comentar que voy bastante mejor con el cólico nefrítico, no he vuelto a tener otro episodio doloroso, el único problema es que como tengo que beber mucha agua me paso el día buscando un baño… pero eso no me va a dejar parado.
Dicen que el ser humano utiliza la historia para evitar que los errores se repitan… pero la realidad es que no hemos aprendido nada del pasado 🙁
🙁